Si te digo la verdad es que es muy triste, tener en algún rincón de mi cerebro tu puta voz diciendo una sola palabra con la entonación y el tono exactos, pero la tengo. Sé que si te pones, recordarás la mía con la entonación y el tono exacto también diciéndote te quiero. Y eso que no te lo dije todas las veces que debería haberlo hecho. Cuélgame. Pero antes, despídete... quién sabe si será la última vez, quien sabe, si ahora puedes decirme te quiero y colgar sintiéndote lo más afortunado del mundo por tenerme contestando "yo más" y pasado mañana decirme... se acabó, enana. Esto no tiene arreglo.
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